“La familia es lo más importante, es
incluso más importante que el béisbol”.
Luis Tiant Jr.
Los peloteros cubanos de calidad eran tantos, que debutaban fuera de Cuba por no tener lugar en las nóminas de los cuatro equipos que competían en la desaparecida pelota profesional en 1961. Había otros que eran sluggers fuera de Cuba y cuando llegaba el invierno se tenían que conformar como reserva en el banco. Bien, al grano, el lanzador derecho Luis Clemente Tiant Vega, el hijo de otro lanzador, el zurdo Luis Eleuterio Tiant Bravo, del que hablaré, es un ejemplo de lo dicho.
El papá de Luis Clemente fue un lanzador con aceptables resultados en las Ligas Negro, circuitos en los que lanzó 11 temporadas en el período entre 1930 y 1947, mientras que en Cuba lo hizo desde 1926. Luis Eleuterio era famoso por sorprender a hombres en primera, era un artista según los expertos de la época. También dicen ahora, no he leído nada de la época al respecto, que tenía un wind up enredado, el que confundía a los bateadores.
Su hijo, Luis Clemente, había nacido el 23 de noviembre de 1940 en Marianao, “ciudad que prospera”, ¿Se acuerdan del cartelito que estaba a la entrada de Marianao una vez uno pasaba el puente sobre el parque Almendares? De Marianao salieron varios peloteros de calidad. Luis Clemente, al que con el tiempo comenzaron a llamar el Tiante, había debutado como lanzador en México en 1959 con los Tigres de la capital. Pitcheó bastante, pero las cosas no salieron como él hubiera querido, G-P 5-19 (,208). Un año después todo cambió, 17 victorias y 7 derrotas, con 9 juegos completos. Y todavía en Cuba la afición no lo conocía.
Vino la crisis en 1960, la MLB se negó a autorizar a los peloteros estadounidenses que fueran a Cuba. Ya al país se le había quitado la sede de los Cubans, trasladada para Jersey City. El caso fue que el campeonato de la pelota profesional cubana se vio obligado a jugar con peloteros criollos. Gracias a Orestes Miñoso, entre otros, los que hablaron con la dirección de la MLB para que les dieran el permiso para poder jugar en Cuba. De eso en la Habana no se acuerdan o lo mencionan a conveniencia. Esto dio oportunidad a que muchos peloteros criollos pudieron debutar y dar un buen espectáculo.
Miguel Ángel González, el reglano dueño de los Leones del Habana y otrora pelotero- mánager-coach en grandes ligas, no se cansaba de traer peloteros estadounidenses para nutrir sus nóminas en la década de los 50 y se vio carente de suficiente pelotero cubano para cubrir sus necesidades en 1960. Hubo que hacer unos canjes forzados. El Habana así adquirió los servicios del receptor Rafael Noble y de Octavio “Cuquí” Rojas del Cienfuegos, así como otros peloteros disponibles. A su vez, Miguel Ángel trajo a varias figuras cubanas con resultados fuera del país. Entre estos estaban dos lanzadores, los que se destacarían en las Mayores posteriormente, eran ellos Diego Seguí y Luis Tiant Jr.
Fermín Guerra, el mánager del Habana en esa temporada, usó bastante a Tiant. El marianense logró ganar 10 juegos, casi la tercera parte de lo que ganaron los Leones (G-32) en esa justa. Como le vi entonces lanzar, afirmo que Tiant no usaba el wind up que le hizo luego famoso, sobre el cual quisiera referirme en otro artículo, pero sí tenía una bola rápida que cruzaba a cualquiera. Tampoco tenía bigote al inicio de esa temporada.
Tiant Jr. no llegó a las Mayores hasta 1964, debutó con la tribu de Cleveland exitosamente (G-P 10-4 ,714). En 1968 se desbordó, G-P 21-9, PCL 1.60, 9 lechadas y 264 K en 258 entradas. Significo esto para aquellos que dicen que el éxito de Tiant comenzó en los 70, muy incierto. Él ganó 104 juegos, 63 juegos completos y 21 lechadas para la tribu en el período de 1964 a 1969. Es cierto que en 1969 su rendimiento en las filas de los ahora Guardianes decayó y así pasó a lanzar con los Mellizos en 1970 (7-3 ,700). Fue transferido a los Medias Rojas en 1971, temporada para olvidar, pero las cosas cambiaron en 1972, Tiant volvió a ser el ganador de antes. Archivó 122 victorias, 113 juegos completos y 26 lechadas lanzando para los de Boston entre 1971 y 1978. Los expertos afirman que Tiant en esa época fue que usó su wind up, enseñando su número en su espalda al bateador rival. Abran el enlace abajo y lo verán lanzar.
Tiant Jr. asistió a sólo 2 post temporadas, la primera con los Mellizos en 1970, nada bueno que recordar. En 1975 fue todo un caballo, ganó 3 juegos (1000) y propinó 20 ponches. Su equipo perdió con el Cinci 4-3, dos de las 3 victorias de los Medias Rojas se debieron a la labor del cubano.
Tiant Jr. era un pitcher incansable, su laboriosidad recuerda la de Miñoso como jardinero. Siempre jugando en la liga que fuera. Fue el pitcher cubano con más victorias, superó así a Adolfo Luque, Camilo Pascual y a Miguel Cuellar (vean la tabla abajo). Sus numeritos en la MLB, G-P 229-172 (.571), juegos completos 187, lechadas 49, salvados 15, PCL 3,30, WHIP 1,20, K 2416 en 3486,1 inn. Mírenlos bien, sobre todo los ilustres votantes en Cooperstown, ¿cuántos están y no se parecen?

Como todos sabemos, en 1961 se acabó la pelota profesional, la esclava como la calificara el líder máximo. Como para reír, esclava fue la que vino después. Aparte de no tener acceso a los juegos de la MLB, en el país no se publicaba nada de nada sobre esta pelota. Por esa razón los cubanos nos vimos privados de poder disfrutar de lo que Tiant y otros peloteros cubanos hicieron. Sí recuerdo que, en viaje a congreso técnico en 1979, hablé de béisbol con algunos colegas norteamericanos y uno de ellos me decía que ya no había muchos peloteros cubanos como antes en la MB, pero que aún les quedaba Luis Tiant activo, de quien me habló maravillas y de su wind up.
A mediados de los 90 del siglo pasado tuve que viajar varias veces de Roma, Italia a Venezuela por razones de un proyecto de trabajo y aprovechaba en mis ratos de ocio para ver juegos de la fuerte liga invernal venezolana, en la que Tiant ya entonces era entrenador de pitcheo. Una sorpresa tuve en 1998 cuando había terminado de desayunar en el hotel en Caracas y miré, me dije ese es Luis Tiant, quien se disponía a desayunar. Allá fui a saludarle, era un placer darle la mano al Tiante, todo transcurrió amigablemente hasta que se presentaron dos entes del INDER. La cara de Tiant cambió en el acto, adiviné que querían hablar con él, por lo que me despedí y desearle lo mejor. Supongo que estaban allí para pedirle al Tiant que fuera a Cuba a dar algunas de sus clases, me imaginaba la respuesta por las dificultades que él tuvo para sacar a su padre del país, pero bueno, son conjeturas de uno.
Tiant falleció el 8 de octubre de 2024. Siento mucho la muerte de un hombre que le dio mucha gloria a su país, brilló y no poco. Cuanta satisfacción tendría si el comité correspondiente de Cooperstown lo exaltara, como él merece, al Salón de la Fama.
Esteban Romero
10 octubre 2024

