“Yara (2021)”, abuso y crimen finalmente descubierto

Tiene que haber tolerancia cero con la
violencia hacia niños y adolescentes.”
Anon.

En el filme de referencia no hay ficción, sí mucha realidad de un mundo que vive la violencia de género en cuanto sitio haya existencia humana. La cinta de producción italiana contó con el guion de Graziano Diana y Giacomo Martelli, la dirección de Marco Tullio Giordana y el protagonismo de la actriz siciliana Isabella Ragonese en el papel de la fiscal Letizia Ruggeri y un reparto que hizo muy bien su trabajo de interpretación. 

La trama es sobre una adolescente italiana y de padres italianos también, que por ocurrencia familiar se le bautizó como Yara, nombre que significa mariposa en árabe. El lamentable hecho ocurre en Bergamo, ciudad del norte de Italia, capital de la provincia homónima y parte de la región de Lombardía. Siempre la he tenido como una ciudad con inviernos severos, algo que la película refleja con sus calles nevadas. Históricamente a Bergamo se le conoce como la Città del Mille (Ciudad del Mil) debido a la integración de miles de voluntarios en el ejército al mando del gran Giusseppe Garibaldi para combatir a los Borbones en la guerra por el reino de las dos Sicilias en octubre de 1860.

Volviendo al filme, a finales de 2010 hubo el secuestro muy sonado por la prensa de la casi niña Yara, la que semanas después apareció muerta en un descampado en las afueras de Bergamo. Aquello estremeció a toda Italia, incluida la familia del que suscribe, por lo que la policía se dio a la tarea de investigar el hecho con muy pocas posibilidades de descubrir al culpable, a no ser que se pusieran los recursos necesarios para este fin y desarrollar una pesquisa a fondo.  Fue esto lo que se propuso la fiscal Letizia Ruggeri, investigar durante años y con métodos tradicionales. Por suerte, vivimos en un mundo donde hay desarrollo científico en el campo de la biología molecular, se sabe lo que es un gen, segmento corto del ácido desoxirribonucleico (ADN), parte importante de los cromosomas. Ellos nos indican en su conjunto el material hereditario del cuerpo humano y la forma como funciona.

No hizo falta un detective a lo Sherlock Holmes o del tipo de Philip Marlowe para llegar al meollo del crimen. Por demás, jamás habrían llegado de otra manera, solo la ciencia podría lograr este descubrimiento. Los científicos de varias instituciones italianas ayudaron enormemente en este empeño. Encontrar la aguja en un pajar fue posible cuando se descubrió un alelo, una de las maneras en que puede manifestarse un carácter o un gen. Los alelos siempre ocupan la misma posición en los cromosomas homólogos.

La fiscal tuvo suerte de esta valiosa ayuda, mientras los políticos, como de costumbre, no hacían otra cosa que criticar, hablar con fines electorales, nada que tuviera que ver con Yara y de satisfacer a su familia, el clásico bla, bla, bla, criticaban que la investigación había costado mucho, que la fiscal era una inepta. Por suerte, no digo más, todo llegó a feliz puerto y los políticos tuvieron que hacer lo que siempre hacen, callarse.

No faltó el ingrediente xenófobo en el caso, suponer que había sido un extranjero el autor del crimen. Pobres árabes, esos que se ganan la vida limpiando parabrisas de autos en las calles de Italia, que no tienen ni pizca de terroristas, pero son los primeros en ser investigados.

Realmente la película fue un éxito en su realización, muy completa al abordar este caso y resaltar los logros y deficiencias en la investigación. En una escala del 1 al 10, le doy un 9 muy merecido. Es de esperar que sea premiada debidamente, al menos en los diferentes certámenes de cine existentes en Europa.

Escrito por Esteban Hernández, con info de IMDB.com y de Santos Isidoro M.A. 2021. “Yara”: el cazador de mariposa. Cinemagavia, 7 noviembre. https://cinemagavia.es/yara-pelicula-critica-netflix/

Los nuevos peloteros cubanos, miembros del Salón de la Fama: II. Pedro “Tony” Oliva 

Todavía sueño con todo lo logrado. Sueño
sobre mi carrera, sueño con el béisbol, de haberme
reunido con mucha gente y de haber viajado bastante.”
Tony Oliva

Tony Oliva al bate

Tan pronto supo Tony Oliva de su exaltación al Salón de la Fama, habló de cuanto le habría gustado que su familia lo hubiera visto jugar en sus años de esplendor en las Grandes Ligas. Oliva sufrió por el color de su piel a su llegada a EE UU, pero también de la segregación deportiva y política implantada en Cuba. ¿Cuántos conocían a Oliva en Cuba? Ni siquiera por el hecho de haber sido campeón de bateo en su año de novato y luego en el siguiente año, algo que ningún otro pelotero novato ha hecho a ese nivel, se habló de Oliva. Tampoco se le agradeció lo que aportó al equipo Cuba en la década de los 70 desinteresadamente.

Tony Oliva como Orestes Miñoso son cubanos, lo fueron, lo son y lo serán por siempre, pues no hay ideología que les pueda quitar esa condición, son héroes indiscutibles de su patria. No voy a hablar de lo hecho por el pinareño, pues ya lo hice con anterioridad. Los interesados pueden ver el link del artículo sobre Oliva al final del presente. Sin embargo, es importante detenerse en algunos detalles.

Oliva salió de un lugar llamado Corralito en los entornos de Consolación del Sur, área muy tabacalera. Oliva jugaba de domingo en domingo, es de suponer que no con muchos medios a su alcance, no jugó en liga amateur alguna, era un hombre nacido para jugar pelota, ya que desde que llegó a debutar en equipos de liga menor rompió la bola a su antojo. Oliva reafirma la idea de que el pelotero como el boxeador nace. Es cierto que se le puede enseñar algo para potenciar sus habilidades, pero no es que necesite de mucha escuela para hacerse pelotero, aprenden al calor del juego, viendo como los más veteranos ejecutan, eso sin faltar algún que otro consejo de los entrenadores.

Por eso no es para creer de que los peloteros emigrados o escapados de Cuba, son un producto de una enseñanza, producto de un valor añadido, el cual, por cierto, se ha querido cobrar o se cobra con los que juegan en Japón. 

Lo otro es como se paraba Oliva en home para batear. De los bateadores zurdos que recuerdo, están Amorós, el que solía agacharse algo y movía constantemente el bate sobre su hombro izquierdo. Marquettí no es que se agachara, la ubicación del bate hacía un ángulo recto con su hombro. Muñoz se paraba bastante erguido y su fuerza al bate, entiendo, radicaba en su fortaleza física. Juan Vistuer era bateador zurdo, de estatura inferior a Muñoz, pero que se paraba en home muy parecido al Gigante del Escambray. Amorós y Marquetti sacaban el bate con velocidad, aunque si de velocidad se trata, recuerdo a Arturo Linares varilla en mano y con una velocidad enorme, pero “Escalera” no era slugger. Por los videos vistos de Oliva bateando, se ve que se paraba erguido, con alguna similitud a Muñoz, y su swing previo al bateo era de arriba abajo, como si fuera a golfear, sostenía el bate casi vertical con relación a su hombro izquierdo, era capaz de golpear fuerte bolas afuera como adentro y las que caían en la zona baja deben haber sido bien castigadas.

Tony Oliva tiene varias hazañas como bateador. El 9 de junio de 1966 los Mellizos lograron batear cinco jonrones casi consecutivamente. Lo interesante de esa racha de cuadrangulares es que en ella se incluyeron dos cubanos. Sucedió en la séptima entrada en partido contra los Atléticos de Kansas City, los que alineaban con el matancero Bert Campaneris en el campo corto y con Ken “Halcón” Harrelson, mi narrador preferido, como inicialista. En las postrimerías, el cienfueguero José Tartabull bateó de emergente en la alineación de los Atléticos. Esa entrada la inició Rich Rollins con jonrón como emergente, le siguió el habanero Zoilo Versalles con el segundo, el cubano Hilario Valdespino cedió el primer out, Tony disparó el tercer cuadrangular, el inicialista Don Mincher el cuarto, y para completar, su majestad, el antesalista Harmon Killebrew con el quinto, para este último fue su segundo jonrón del juego. Los lanzadores víctimas de esta masacre, los dos primeros fueron sobre los envíos de Catfish Hunter, relevado por Paul Linblad, el que igualmente sufrió dos estacazos, y finalmente John Wyatt, saludado por Killebrew con jonrón. Oliva narra ese acontecimiento con muchos buenos recuerdos, aunque Camilo Pascual fue el abridor y cedió rápidamente el montículo a Dwight Siebler. Al estelar del montículo le fabricaron 3 carreras en el mismo primer inning.    

Otra logro de Tony O ocurrió en un doble juego del 29 de junio de 1969 cuando el pinareño disparó 8 hits consecutivamente, incluido par de jonrones y un doble frente a los lanzadores de los Reales de Kansas City. En el primer partido falló en su primera vez al bate y luego conectó 3 sencillos, pero en el segundo se fue de 5-5 con 5 impulsadas, juego ganado por el zurdo Jim Kaat, también miembro del Salón de la Fama.

Tiene el mérito de haber sido el primer bateador designado en conectar jonrón en las Mayores, lo que ocurrió el 6 de abril de 1973 frente a los envíos de Catfish Hunter, esta vez lanzando para los Atléticos de Oakland, en juego que ganó Bert Blyleven, compañero de Tony, quien por coincidencia estuvo en el jurado que eligió al cubano miembro del Salón de la Fama.

Pasaron 45 años para que Oliva llegara al Salón. Coincido con su afirmación, si Rod Carew y Harmon Killebrew estaban allí, tenía que haber un lugar para él. Su sacrificio y esfuerzo valió de mucho en su carrera. Llegar a jugar en un país, donde no sabes el idioma y para colmo no puedes dormir y comer donde quieras, no es fácil. Aparte que no tienes el calor ni de tu familia, ni de tu pueblo. Oliva rompía las cercas, pero como jugaba en EE UU, sus hazañas no valían para ser mencionadas ni por radio-TV, ni por la prensa local de su país. Lo que hacían Roberto Clemente, Vic Power u Orlando Cepeda diariamente era de conocimiento del pueblo boricua, pero lo que hiciera Oliva, Tany Pérez, Tony Taylor, Cuellar, Pascual, Tiant Jr. era noticia prohibida para nosotros.

Para finalizar hay una anécdota que quiero compartir de algo que supe de Tony O. Se trata del problema que él confrontaba, como tantos otros latinos, cuando llegan a los EE UU y no saben pedir su comida. Me reía, pues era algo parecido a lo que le sucede a uno cuando va a Japón o a otro país asiático, todo a base de señas, this, this, that, that, pero en el caso de Tony, él se las agenció para llevar consigo dos papelitos escritos por su manager. Uno de ellos llevaba escrito “ham and eggs” (jamón y huevos), el otro “fried chicken” (pollo frito), o sea que su dieta era un día lo primero y al siguiente lo segundo, muy proteica, pero nada balanceada, por cierto. Él mostraba su papelito del día al camarero y era servido a su gusto.

Con la llegada de Oliva y Miñoso al salón son seis los cubanos, pero para los que gustan hablar de la tierrita, aquí les va por provincia: tres son matanceros, Dihigo, José de la Caridad Méndez y ahora Miñoso; uno es de Cienfuegos, Cristóbal Torriente, otro de Ciego de Ávila, Tany Pérez, y Tony Oliva de Pinar del Río. Vendrán otros más en el futuro, que nadie lo dude, esos que como Oliva nacieron peloteros.

Escrito por Esteban Romero, 15 diciembre de 2021, con algunos datos y fechas consultadas en baseball-reference.com

Para los interesados en conocer más detalles de la carrera de Tony Oliva, les invito a leer: https://deportescineyotros.com/2016/04/25/uno-de-los-mejores-bateadores-cubanos-de-todos-los-tiempos-pedro-tony-oliva/

Eladio Valdés-Black Bill, uno de los primeros cubanos destacados en el boxeo

«Es en nuestros sueños y en nuestras aspiraciones
donde encontramos nuestras oportunidades
Sugar Ray Leonard

Eladio Valdés o Black Bill

Es deber aclarar que en el boxeo han existido púgiles con el apodo de Black Bill. Panamá tuvo uno que peleó en los pesos plumas a partir de 1942. No obstante, el más grande de todos, el más efectivo en el ring lo fue el cubano Eladio Valdés, hombre nacido en mayo de 1905 en la Habana. No es errado suponer que se haya criado en la Habana Vieja, en ese ambiente existente de gente pobre de las calles Habana, Cuba, San Ignacio, Paula, Picota y Merced entre otras. Allí el boxeo de siempre ha sido un deporte muy practicado por la gente de escasos recursos económicos. A su vez, tampoco es errado suponer que Eladio haya sido huérfano o hijo o nieto de huérfano, ya que el apellido Valdés se les daba a esos que no tenían padres.

Su tamaño no era nada, 161 cm y poco peso, por eso casi siempre boxeó en la división de los moscas. Eladio debe haber boxeado algo en la calle para ganarse alguna peseta entonces y en cuanto le vieron habilidades como púgil, no tardaron mucho en montarlo en un cuadrilátero, lo que sucedió el 1 de enero de 1920, pelea ganada por puntos, contra Enriquito Valdés. A continuación, obtuvo 8 victorias consecutivas y su décima pelea fue tabla contra Julio Otamendi el 2 de mayo de 1921. En ese año logró su primera victoria por KO sobre Kid García el 9 de junio, e hizo lo mismo con A. Cardona un mes después. Su primera derrota, por puntos, fue frente a Kid Castro el 3 de setiembre de 1921. Hasta ese momento tenía 16 victorias y dos tablas. Al inicio de 1922 perdió tres peleas consecutivamente, dos de ellas frente a Antonio Valdés, a partir de ahí se recuperó e hilvanó una racha de 10 victorias hasta perder frente a Genaro Pino en opción al campeonato nacional de los pesos moscas el 10 de octubre. No obstante, no se amilanó y su racha siguiente fue de 17 triunfos incluido 5 por la vía rápida. Genaro Pino se incluyó entre sus vencidos, además de Kid Guanajay, Kid Molinet, Kid Delgado, Emilio Casado, Modesto Morales, Ramón Pérez, Tommy Albear, Antonio Valdés y Diego Pedroso entre otros. En su pelea del 7 de mayo de 1923 frente a Genaro Pino logró coronarse campeón nacional de su división.

Black Bill o Bombón Purgante era un boxeador imparable, lo mismo golpeaba por el lado izquierdo que por el derecho, por todos los ángulos. Sin ser púgil de gran punch su agresividad era comparable a la de otros boxeadores como Harry Greb y Jackie «Kid» Berg.

Su primera pelea fuera de Cuba tuvo lugar en el pabellón Santa Ana en Ciudad Panamá contra el colombiano Anastasio Ortiz, alias Kid Vaquero, el 11 de octubre de 1924, pelea que resultó tabla. A continuación, en Panamá derrotó al pluma panameño Kid Campbell, luego entabló con otro panameño, Santiago “Kid” Zorrilla y con el mismo Campbell. Regresó a la Habana para pelear el 1 de marzo de 1925 contra Genaro Pino, al que venció por decisión nuevamente y un mes después debutaba en el Sporting Club de Nueva York, donde venció por puntos al mosca norteamericano Robert Ruttenberg, alias Bobby Burke, a quien volvió a vencer a inicios de 1926. Ya casi asentado en el boxeo rentado de los EE. UU., Eladio ganó varios combates, pero perdió por puntos contra Davey Adelman y Young Chappie.

Uno de los rivales más encarnizados que tuvo el cubano fue el neoyorquino judío Isadore «Corporal Izzy» Schwartz, a quien logró vencer en 12 asaltos en su primera pelea el 27 de junio de 1925. La revancha no se hizo esperar y se volvieron a enfrentar el 20 de julio del mismo año en el estadio Queensboro de Brooklyn. Fue una pelea a 10 asaltos, en la que se fajaron ambos púgiles de campana a campana, siempre en la corta distancia, cada uno dando lo mejor de sí. El cubano ya en el noveno asalto perdió algo de su velocidad por molestia en su rodilla, pero continuó dando y recibiendo. Al final, el cubano ganó por decisión.

La tercera pelea fue en Nueva York el 17 de setiembre de 1925, en la que el cubano comenzó impetuoso, pero impreciso en sus golpes, mientras que Izzy Schwartz sacaba ventaja, al extremo que en el noveno asalto el cubano estaba exhausto. El neoyorquino supo manejar muy bien su jab en la media distancia y estuvo muy veloz en el golpeo. Una vez más la rodilla se convirtió en dificultad para el cubano en la pelea. La decisión fue unánime a favor de Schwartz.

Increíblemente, Black Bill volvió a pelear nueve días después contra Young Dencio, al que venció en 10 asaltos, pero cuatro días más tarde, en Filadelfia, volvió a treparse al ring para boxear frente a Wee Willie, quien superó al cubano de calle. Un poco más de dos semanas después, volvió a pelear en Nueva York, esta vez contra el inglés Ernie Jarvis, En ese bout, Jarvis conectó sus mejores golpes en el octavo asalto cuando el cubano nuevamente denotaba cansancio y había sufrido del golpeo continuo del británico.

Black Bill en 1927

Ocho días después de esa derrota, una nueva pelea, la cuarta contra Izzy Schwartz, de nuevo en Nueva York. Esta pelea sirvió para finalizar la racha adversa de derrotas de Black Bill. El cubano le dio con todo a Schwartz, quien estuvo a punto de ir a la lona cuatro veces. Era un promedio de cuatro golpes del cubano contra uno del hombre de la Gran Manzana. 

Estos dos púgiles se volvieron a enfrentar en dos ocasiones nuevamente, con victoria para el cubano el 8 de agosto de 1928 y derrota el 20 de noviembre de 1928, ambas peleas efectuadas en la Habana. Así que el balance final fue de 4 victorias para el cubano y dos para el neoyorquino, el negrito de la Habana le ganó al de Nueva York, ya que Schwartz significa negro en alemán y en yiddish (shvarts).

El otro rival difícil fue Wee Willie, con quien entabló dos veces en junio y julio de 1926 en la Habana. El 4 de noviembre de 1929 Black Bill logró su primera victoria sobre este púgil en el Madison Square Garden. El norteamericano lo volvió a vencer el 2 de junio de 1930 en el Meyers Bowl, cuando ya el criollo estaba en decadencia.

La pelea más importante que tuvo Black Bill fue en opción al título mundial de su peso fue contra Joseph Robert Loscalzo, apellido claramente de origen italiano, cuyo alias era Midget Wolgast. Era hombre que peleaba y pegaba bien con ambas manos, de la misma estatura de Black Bill, quien venía de haber efectuado su última pelea en la Habana, la que tuvo lugar el 1 de marzo de 1930 contra el boxeador español Manuel González, al cual aventajó por la clásica milla. Tres semanas después el cubano tenía su importante compromiso con Midget Wolgast en pelea pactada a 15 asaltos.  

Black Bill en 1933, foto dedicada al comentarista Jess Losada

Esa pelea fue fatal, el cubano no llevaba la preparación de su rival. Así y todo, en el mismo primer round Black Bill logró cortarle un ojo con un golpe, pero Wolgast ripostó y dominó durante el resto de la pelea a base de fuertes ganchos de izquierda, a la vez que le cortó el ojo izquierdo del cubano con un fuerte derechazo. Se dice que después de la pelea había perdido ya la visión de un ojo. El cubano nunca perdió la acometividad, pero ante la superioridad de preparación física del adversario poco fue lo que pudo hacer. A partir de ahí comenzó la decadencia de Black Bill. Sufrió dos derrotas con Wee Willie, a quien le pudo ganar una sola vez, sucedió el 4 de noviembre de 1929. Luego perdió por primera vez contra Marty Gold, boxeador que había sucumbido cuatro veces ante los puños de Black Bill. Otra derrota ante el púgil húngaro Antal Kocsis, para luego entablar con el boricua José Lago en San Juan y derrotar a otro puertorriqueño, Yambo Andrade, el 1 de enero de 1931 para despedirse del boxeo, ya sin vista de un ojo y con escasa visión del otro.

Como resumen de su carrera, ganó 123 peleas, 20 por la vía del sueño, perdió 24, jamás fue noqueado, y entabló 13. En su lista de víctimas hay que añadir a Johnny McCoy, Willie Davies, «Corporal» Izzy Schwartz, «Battling» Al Murray, Sammy Bienfield, Eugene Huat, Happy Atherton, Bobby Green, Henry «Henny» Catena, Benny Marks y Pincus «Pinky» Silverberg.

Black Bill y Kid Chocolate

Black Bill no era una persona ecuánime en su conducta personal. Antes de morir llevaba dos años ciego. Se comentaba que un rival utilizó resina en uno de sus guantes, lo que le afectó un ojo inicialmente, pero ¿quién fue el delincuente? ¿Wolgast?, nadie lo sabe. Su entrenador de siempre fue el mismo de su amigo el boxeador y futuro campeón mundial Kid Chocolate, Luis Felipe Gutiérrez, más conocido como Pincho Gutiérrez, quien nunca le abandonó y le dio apoyo económico, pero el púgil acostumbrado a ganar dinero en abundancia, se vio en la pobreza en Harlem, Nueva York, sin poder hacer nada para poder mejorar producto de su ceguera, por lo que el sábado 8 de abril de 1933 se dio un tiro en el abdomen, de extrema gravedad, permaneció 6 días hospitalizado hasta que su cuerpo cedió y así falleció el boxeador que, puede ser considerado como el primer cubano más destacado en este deporte profesional a nivel mundial.  

Fuentes

Anon. Black Bill-Eladio Valdes. Cyberboxingzone.com http://www.cyberboxingzone.com/boxing/black-bill-valdes.htm

Anon (s/a). Black Bill. Boxrec.com. https://boxrec.com/en/proboxer/27839?offset=0

Navas González Edemio. 2020. Boxeo cubano: muchos campeones mundiales en el año del COVID. Radiotelevisionmarti.com, 31 diciembre. https://www.radiotelevisionmarti.com/a/boxeo-cubano-muchos-campeones-mundiales-en-el-a%C3%B1o-del-covid/282023.html

Pi Guillermo. 1933. Black Bill es el segundo de los grandes boxers de color que pierde Cuba; el primero fue el inolvidable Kid Charol. Diario de la Marina, 15 abril, p. 12.

UP. 1925. Black Bill dominó a Schwartz en 12 rounds sin discusión alguna. Diario de la Marina, 28 junio 1925, p 17-18.

UP. 1925. Bill empezó su pelea a un gran tren, pero el cabo Schwartz le ganó fácilmente por decisión. Diario de la Marina, 18 setiembre, p. 19 y 22.

UP. 1925. Black Bill acabó anoche con el cabo Schwartz. Diario de la Marina, 25 octubre, p. 19.

UP. 1925. Black Bill comenzó bien su bout con el inglés Jarvis, pero este lo superó desde el tercer round. Diario de la Marina, 17 octubre, p. 17

Vila Joe. 1925. Black Bill logra que el veredicto de los jueces sea a su favor en la revancha que dio a Schwartz. Diario de la Marina, 21 julio, p. 19-20.

Escrito por Esteban Romero, 12 diciembre de 2021

“Viento de libertad (2018)”, una penosa realidad de los regímenes totalitarios

La libertad está en ser dueños de la propia vida.
Platón

“Viento de Libertad” o su título original “Ballon” es un filme de producción alemana, que presenta una especie de suspense, todo ocurrido en la ya no existente Alemania Oriental.

Los regímenes autoritarios del Este europeo bajo la tutela de la URSS y otros existentes en el Caribe como en el lejano oriente, de siempre han tomado medidas a fin de que sus ciudadanos no viajen, ni conozcan las realidades del otro mundo político. Alemania oriental fue una de las más destacadas en esas acciones. La Stasi o Ministerio para la Seguridad del Estado fue la institución más activa en la persecución de cuanto opositor apareciera en la llamada República Democrática Alemana (RDA), tampoco permitía viajes de sus ciudadanos a la otra Alemania, mucho menos de un Berlín a otro. Un ejemplo de ello fue la construcción de 155 km de muro a partir del 12 de agosto de 1961, con los cuales Berlín quedaba picoteado. Su ampliación continuó, pero ello no fue óbice para que miles de alemanes trataran de saltar o burlar el muro, muchos de los cuales murieron en esos intentos. Se sabe que la alta dirigencia de la RDA había dado órdenes de disparar a cuanta persona intentara pasar el muro. Mientras eso sucedía los berlineses occidentales cruzaban al otro lado para disfrutar de una noche en los pubs y sitios de baile de Berlín Oriental. Les bastaba pagar una cuota en marcos a la entrada, los orientales veían esas libertades de las que ellos no gozaban.

La película está dirigida por Michael Bully Herbig y su trama está basada en la fuga de dos familias en un globo aerostático ocurrida el 6 de septiembre de 1979. Realmente hay que tener ingenio para construir ese artefacto y que se mantuviera lo necesario en el aire para poder aterrizar del otro lado de la frontera, pero también está el hecho de conseguir todos los materiales, telas, tubos, elementos de propulsión, tratando siempre de levantar la menor sospecha, algo que no era fácil en lo absoluto.

Parte del vecindario podía sospechar algo, pero esas personas no eran capaces de delatar o hacer suponer una cosa similar a la Stasi, muy ocupada en descubrir de quien había sido la idea de un primer vuelo fallido. Otras, por el contrario, dijeron todo lo que vieron, pero sin poder afirmar nada que afectara a nadie. La Stasi tenía que suponer los hechos por sí mismo, colaboración ciudadana no existía. Incluso cuando una mujer fue interrogada, ella dio sus argumentos como si no tuvieran ninguna importancia.

Cuando la Stasi logró adivinar el intento, ya le resultó tarde, y eso en esos regímenes se paga con la dimisión o la cesantía de los cargos policiales encargados del asunto.

El filme alemán “La vida de los otros (2006)” al espectador lo mantiene en suspense durante buena parte de la peli, “Viento de libertad” le hace una verdadera competencia. Como quiera que sea, ambas películas muestran el carácter dictatorial y cómo estos regímenes violan los derechos humanos en general.

Escrito por Esteban Hernández, con información consultada en IMDB.com y “Viento de Libertad, o cómo cruzar el Muro de Berlín en globo aerostático” https://www.muyhistoria.es/contemporanea/articulo/viento-de-libertad-o-como-cruzar-el-muro-de-berlin-en-globo-aerostatico-191567527489

Los nuevos peloteros cubanos, miembros del Salón de la Fama: I. Orestes Miñoso

Yo amo a todo el mundo, del Sur, del Norte,
del Este. Los amo a todos y les respeto.”
Orestes Miñoso

El gran Orestes Miñoso

Al fin le llegó el premio al hombre de Perico, Matanzas. A estas alturas hay un periodista en Chicago que no se ha enterado que Orestes Miñoso no es de la Habana. Miñoso es tan matancero como Martín Dihigo, José de la Caridad Méndez, Edmundo Amorós, Bert Campaneris, Leo Cárdenas, Silvio García y otros peloteros cubanos más destacados de esa provincia.

Miñoso siempre dijo que le gustaría llegar al Salón de la Fama en vida, no post mortem, lamentable, pero sucedió tal como él no quería. En este artículo deseo reflejar algunos detalles que había encontrado hace un tiempo sobre los primeros pasos del matancero en territorio de EE. UU., primero en las Ligas Negro, luego en las Menores y las Mayores. Algunos de estos detalles no aparecen casi reflejados en su autobiografía, quizás por la modestia que caracterizaba a Miñoso como persona.

Miñoso firmó con los New York Cubans en 1946, lo que implicó que el cubano se  trasladara a jugar a los EE. UU., territorio desconocido para él, pero con la suerte que en ese equipo jugaban ya algunos cubanos, como es el caso de Silvio García, el que orientó a Miñoso en todo lo que pudo. Otros dos que le ayudaron igualmente fueron el receptor Rafael Noble y el lanzador Luis Tiant Sr. Ellos todos ya hablaban inglés y conocían las costumbres del lugar, lo que le estaba permitido y prohibido a un ciudadano negro en ese país entonces.

Su primera temporada con los NY Cubans no fue del todo exitosa, pero en las siguientes dos bateó a sus anchas con OPS por encima de .880. No obstante, hay un detalle interesante y fue que Miñoso asistió al entrenamiento primaveral de los Cardenales de St Louis en 1947. Los de Missouri habían anunciado que todos los interesados en participar podrían hacerlo, por lo que el matancero no dudó en presentarse. Fue ese año en que debutó Jackie Robinson y rompió la barrera racial en las Mayores. Una cosa que no gustó de Miñoso eran sus tiros a primera desde tercera, algo que era archiconocido, metía en ocasiones la bola en las gradas por su potente brazo, pero no exacto en puntería. Así y todo, bateó y enseñó sus condiciones, pero como dijo luego Miñoso, “me trataron como un pelotero de manigua”.

Su desempeño en 1948 no pasó inadvertido a los ojos del dueño de los Indios de Cleveland, Bill Veeck, el que no dudó en contratarlo y llevarlo a jugar en el Dayton, Liga Central (clase A), cuyo manager era Joe Vosmik. Allí jugó 11 partidos solamente y Veeck le preguntó sobre el desempeño del cubano a Vosmik, el que no dudó en responderle que ese pelotero estaba listo para batearle a cualquier lanzador en cualquier nivel. Vosmik refirió que en un juego le hizo seña a Miñoso de no hacer swing, pero el cubano no entendió y de inmediato sonó batazo de jonrón. Vosmik quedó confuso, por lo que al llegar Miñoso al dugout, le preguntó si no había visto su seña. Miñoso, siempre jocoso, sin saber la realidad, le respondió en su inglés chapurreado entonces: “Oh, sí, me mandó a batear, por eso le hice swing y di ese jonrón.”

Además de haber sido un extraordinario pelotero, Miñoso era persona de buen humor, bien llevado con sus compañeros de equipo, siempre concentrado en su juego en el terreno. Poco le importaba lo que pensara la afición en las gradas sobre su condición de negro, por eso, se puede decir, triunfó. Llegó a ser el primer latino negro en las Mayores y el primero en la franquicia de los Medias Blancas y en cualquier equipo de la ciudad de Chicago.

Los Indios de Bill Veeck no valoraron bien al cubano, el que rompió la liga con su juego y bateo con los Padres de San Diego, entonces equipo de la Costa del Pacífico (clase AAA). Miñoso era rápido y muy preciso deslizándose en las bases, Vosmik decía que en eso era perfecto. Ya en 1949 recibió 12 pelotazos con los Padres, su forma de batear, agachado y casi encaramado arriba del home, con su bate en alto, provocaba que mucho de lo que venía por dentro chocara contra su cuerpo. Les digo haber visto pelotazos cuando jugaba con el Marianao, que eran para tumbar a un monumento de piedra, y verlo salir campante hacia primera.

En 1951, con un mes ya de juego, Miñoso se desempeñaba en la primera base de los Indios, estaba bateando sobre .400, y vino el raro canje tripartito, que lo llevó a jugar regular al Comiskey Park de Chicago, pero como antesalista y jardinero. Al final de la temporada, la discriminación se hizo presente, Gil McDougald no fue mejor en nada sobre Miñoso, ah, pero era el antesalista de los Yankees en ese momento. McDougald quedó noveno en la votación para el MVP, Miñoso fue cuarto. Miñoso bateó .326 en la Liga en esa temporada, segundo en promedio ofensivo, McDougald bateó para .306 (23 dobles, 4 triples, 14 jonrones, 14 robadas y 63 empujadas, OPS .884). Miñoso- 24 dobles, 9 triples, 10 jonrones, 74 impulsadas, OPS .922. Había diferencia de color, pero también de rendimiento. Así y todo, la Asociación de Escritores de Béisbol de América le dio el premio de novato del año a McDougald, el que tuvo el extra de haber jugado en la Serie Mundial con el equipo campeón. Suerte que el Sporting News no era de la misma opinión y otorgó ese mérito al cubano, pero el que valía era el primero.

En cuanto al MVP, Yogi Berra se llevó el premio ese año, el que bateó para OPS de .915, donde se incluyen 19 dobles, 4 triples y 27 jonrones, con 88 impulsadas. Frank Lane, manager de los Medias Blancas en 1951, declaró abiertamente que Miñoso merecía ambos premios, el de novato y el de MVP, aparte de añadir que parecía que para ser premiado había que jugar en el equipo campeón.

Miñoso hizo historia y es un ejemplo para todos los cubanos que llegan a jugar en ese nivel. Entrenar, jugar y mostrar todo lo mejor de sí en cada juego. Solo así se triunfa.

Escrito por Esteban Romero, 14 diciembre de 2021

En una segunda entrega, se hablará de Pedro “Tony” Oliva.

Si desea saber más sobre Miñoso, les invito a leer: https://deportescineyotros.com/2015/09/20/las-vicisitudes-de-orestes-minoso/

Luis Ángel Firpo, el argentino que pudo ser campeón mundial de los pesos pesados en el pasado

Si soy yo el que recibo los golpes, seré
yo quien disfrute de los beneficios”.
Luis Ángel Firpo

Creo necesario este artículo, ya que cuando escribí el relacionado con Jack Dempsey, realmente le pasé por arriba a la pelea que este boxeador sostuvo con el argentino Luis Ángel Firpo, conocido como El Toro de las Pampas. En esa oportunidad relataba: “Las siguientes dos peleas de Dempsey terminaron por la vía rápida. Expuso su título frente al francés Georges Carpentier el 2 de junio de 1921 en Jersey City, pelea que terminó con KO en el cuarto episodio. Igual suerte corrió el argentino Luis Ángel Firpo, el que sucumbió en el segundo round ante los puños de Dempsey. Esta pelea tuvo lugar el 14 de setiembre de 1921 en el Polo Grounds de Nueva York.” Como se ve, una pelea de dos rounds, la que consideré de puro trámite, pero equivocado estaba y creo justo resarcir a ese gran púgil con lo que escribo y relato a continuación. De hecho, se puede afirmar que, Firpo fue el primer gran boxeador latinoamericano en los pesos pesados a nivel mundial.

Luis Ángel Firpo nació el 11 de octubre de 1894 en Junin, Argentina, en el seno de una familia con padre empleado en tienda, donde Luis Ángel fue el segundo de los cuatro hijos que sus padres procrearon. El futuro boxeador perdió a su madre cuando solo tenía ocho años.

En su niñez sufrió de problemas del oído, que le limitaron para servir en el servicio militar de su país. En su juventud logró un buen desarrollo y fortaleza, lo que, al parecer, le incentivó a iniciar la práctica del boxeo. Llegó a medir 189 cm, con 98,2 kg de peso, y alcance con sus manos de 2 metros.

La primera pelea registrada de Firpo, sin veredicto, fue la que tuvo con el australiano Frank Hagney el 10 de diciembre de 1917, en el International Boxing Club. Entonces existía prohibición de este deporte en Buenos Aires, por lo que se vio obligado a pelear fuera de su país.  Su primera pelea con veredicto oficial la tuvo el 1 de diciembre de 1918 en pelea contra Ángel Rodríguez, en el Teatro Casino de Montevideo, donde Firpo salió derrotado por KO. Luego seis peleas consecutivamente, 5 de ellas por la vía rápida hasta que perdió por puntos contra Dave Mills en el Hippodrome Circo de Santiago de Chile el 1 de noviembre de 1919. Nuevamente hilvanó una racha de 11 victorias, diez de ellas por la vía del sueño. Entre sus rivales estuvo uno de los que más pescozones recibió de parte de Firpo, se trata de Jack Herman, el italiano, neoyorquino, nacido con el nombre de Emilio Buttafochi, o sea descendiente de italiano, de ahí el apodo dado. El mismo Mills y Gunboat Smith, ambos sucumbieron dos veces por KO ante los puños de Firpo. Tres de esas peleas se efectuaron en los EE.UU., incluida la primera contra el italiano.

Firpo, en su esquina, observa al árbitro contar 10 segundos a su rival, Herman

La racha continuó con ocho victorias más por KO, donde se incluye su primera pelea en el Madison Square Garden el 12 de marzo de 1923, donde derrotó a Bill Brennan. Dos meses después dio igual receta a Jack McAuliffe II en pelea en el Yankee Stadium. Su tercera pelea fue en el Nuevo Frontón de la Habana, donde dejó al italiano como, dijo la prensa entonces, “tragando esponja y con una tonelada de hielo en el cogote”. Bastaron dos asaltos para liquidar al azzurro. El 12 de junio de igual año derrotó por KO en el octavo asalto, en pelea pactada a 12 rounds, al experimentado Jess Willard.

Ante tanto empuje del argentino, también llamado como la Esperanza Latina, no era difícil prever un enfrentamiento contra el gran Jack Dempsey, el cual quedó acordado para el 14 setiembre de 1923 en el Polo Ground de Nueva York, con una asistencia esperada de 50 mil aficionados, al final fueron más de 80 mil almas en el viejo estadio de Nueva York. Esa asistencia aportó 1,25 millones de dólares, una cifra elevada para su época.

Jack Dempsey a la derecha y Luis Ángel Firpo

Aunque la pelea duró poco, solo dos asaltos, no dejó de ser emocionante, lo cual pueden corroborar viendo la misma en youtube. Reseñemos lo que dijo la prensa entonces. En el primer asalto, Firpo fue a la lona siete veces, pero uno de los largos derechos aplastantes del argentino atrapó a Dempsey de manera justa y lo tiró a través de las cuerdas. La cabeza del campeón desapareció por el borde del ring, sus piernas vestidas de blanco se dispararon en el aire, y parecía que un nuevo campeón mundial estaba a punto de entrar en su gloria. A la cuenta de nueve, Dempsey logró tambalearse de regreso al ring, pero el final de la ronda lo encontró obviamente muy conmocionado y tambaleándose como nunca antes se había tambaleado. Este fue el relato del primer round, interesante que Dempsey subió con 9 segundos ya contados. Se especuló que a Dempsey lo ayudaron a subir al ring, no lo vi, no lo afirmo, tampoco tengo por negarlo.

Firpo lleva a Dempsey fuera del cuadrilátero

Sigamos, con la descripción del segundo round. La derecha de Firpo fue demasiado lenta para alcanzar al campeón, que atacaba con todas sus fuerzas. Dempsey atrapó a Firpo con una derecha y lo derribó. Dos segundos más tarde, el retador estaba arriba, pero un momento más y estaba abajo nuevamente para la cuenta de cinco. Firpo levantó tambaleándose, Dempsey le vino encima instantáneamente, lo atrapó con una izquierda en la mandíbula y luego lo derribó con una derecha mientras Firpo se hundía. Sangrando levemente por la boca, Firpo se giró lentamente, esforzándose en vano por levantarse, cuando el brazo del árbitro llegó a la cuenta de ocho y nueve, y se puso rígido impotente cuando la décima cuenta terminó con sus esperanzas de campeonato por el momento.

Aun así, veamos lo que dijo el mismo Dempsey: “Creí que llegaba mi hora”. El campeón admitió esta noche, después de su pelea victoriosa contra Luis Ángel Firpo, de no haber recibido jamás tremenda pateadura. Dempsey añadió: “Vencí como creí debí hacerlo, pero admito que nunca me había visto tan apurado en mi vida. Aquellos que me dijeron que Firpo resultaría un coge-golpes, estaban hablando a través de sus sombreros. Después que me pegó fuerte en el primer round, me di cuenta que no estaba en un paseo campestre. Firpo es peligroso desde que entra en el ring y en todo momento. Le pegué con todo y me asombraba como se levantaba una y otra vez. Es un verdadero tigre y pega con la fuerza de un titán. Anoche fue la primera vez desde que boxeo que me han lanzado al suelo y nunca lo olvidaré. Vi ocho millones de estrellas cuando me dio su derechazo en la quijada que casi da cuenta de mí.”

Cincuenta años después de esa pelea, Dempsey añadió: Tan pronto nos encontramos en el medio del ring yo tiré una potente izquierda que no dio en el blanco. Esto es lo único que recuerdo con cierta claridad hasta que terminó la vuelta, porque aprovechando el impulso de mi cuerpo al errar el golpe, Firpo aterrizó su potente derecha en mi mentón. En ese momento me sentí como un barrilete en el aire… Muchos espectadores pensaron que apenas había sido un resbalón mío, pero el hecho es que la trompada de Firpo me había mareado. Por primera y última vez en mi vida mis ojos me fallaron en poner foco adecuadamente. Mientras trataba de recobrarme de los efectos del golpe, veía una docena de Firpos bailando en medio de las luces del ring. De vez en cuando yo disparaba un golpe, pero siempre al Firpo que no era el real. Desde un punto de vista estrictamente profesional yo la estaba pasando mal. No quiero que esto sea mal interpretado, sin embargo. Nunca sentí dolor; un golpe de esa índole adormece el equipo físico del contrincante y le pone una almohada temporaria al cerebro, pero no lo mata. Sin embargo, los boxeadores estamos acostumbrados a tener que capear estos adormecimientos y a esa lucha me dediqué de allí en más. El hecho es que para mí era como si Firpo hubiera instalado los Andes en el medio del ring y los hubiera dotado de movimiento, con él saltando de una cima a la otra.

Tex Rickard, promotor principal de esta pelea, declaró: «Fue una de las peleas más grandes de la hisloria del ring. Alinea me he entusiasmado más. Firpo es uno de los más grandes peleadores de todos los tiempos. l,a pelea de esta noche decidió la suerte y Dempsey venció. Firpo lo tendremos entre nosotros por mucho tiempo, pues todavía no ha dado todo lo que puede de sí. Es grande, fuerte, valiente, joven y es un pugilista con un corazón de tigre”.

Luis Angel Firpo declaró entonces estar listo para encontrarse de nuevo con el campeón por su faja el próximo año. “Regresaré dentro de un año a los EE. UU. Creo haber hecho una buena demostración esta noche. Hice lo que ningún otro hombre le ha hecho a Dempsey, lanzarlo fuera de las sogas. Estuve a punto de ganar en el primer round. Ahora daré un paseo en automóvil por todo el Canadá. Después me dirigiré a la Argentina y cuando torne a estos lares, estaré mejor preparado para el combate.”

Un detalle, el árbitro de la pelea Dempsey-Firpo fue el norteamericano Johnny Gallagher, suspendido cinco semanas después de ese enfrentamiento por la Comisión Municipal de Nueva York al entenderse que no realizó la cuenta en forma reglamentaria e hizo seguir el pleito, según reveló la redacción Democracia. ¿Acaso bastaba con suspender a Gallagher? ¿No era menester hacer justicia y darle la victoria a Firpo?

En lo sucesivo, Firpo tuvo nueve peleas más, dos de ellas contra el piemontese Erminio Spalla, quien además de haber sido boxeador profesional de los pesos pesados, fue actor de cine y cantante. Una larga calle de Roma lleva su nombre en la zona del EUR. A Spalla le venció la primera vez por KO técnico y luego por decisión. No obstante, la pelea más importante fue la que sostuvo con el gran Harry Wills el 11 de setiembre de 1924, en el Boyle’s Thirty Acres de Jersey City. La pelea duró 12 asaltos como previsto. Firpo logró tumbar a Wills con un fuerte derechazo en el segundo asalto, pero el afroamericano se alzó y recuperado impuso su tren de pelea para vencer al argentino. Lo peor de eso no fue la derrota, sino que Firpo fue acusado de haber traído con él a una manicura con fines ilegales, además de haber cometido perjurio en los papeles de inmigración. Ya desde la llegada de Firpo a Nueva York para su pelea con Wills las autoridades de inmigración le detuvieron junto con la dama Blanca Lourdes, nacida en Cuba, pero que viajaba de Buenos Aires a Nueva York junto a Firpo y su comitiva. También fueron detenidos Eduardo Carbone, secretario de Firpo, y Miguel Ferrara, el sparring. Ellos fueron enviados a Ellis Island, donde fueron interrogados. A la cubana se le dejó en libertad bajo fianza de quinientos dólares y que tomaría el primer vapor que saliera rumbo a Cuba. A Firpo se le extendió una visa temporal para cumplir con su pelea. En un inicio se dijo que el visado de la cubana era deficiente y había sido preparado por un tal German Bushell, abogado neoyorquino, el que fue detenido y negó todo vínculo con la Srta. Lourdes, pero luego tuvo que retractarse, ya que su nombre aparecía como la persona que le había preparado el pasaporte a la dama en cuestión. Realmente se vio que la documentación presentada tenía serias deficiencias. Se había dicho que Firpo no tenía nada que ver con ella, lo cual era falso, ya que terminado el interrogatorio Firpo, ella y toda la comitiva se dirigieron a Nueva York juntos. Eso ocurrió el lunes 21 de julio de 1924. La cubana si tuvo que irse en cuanto apareció el primer vapor rumbo a la Habana. Firpo pudo permanecer en EE.UU. hasta el 12 de noviembre de ese año, cuando enfrentó a Charles Weinert, pelea que perdió por veredicto de los jueces.    

En la pelea contra Harry Wills, L.A. Firpo fue a la lona en el 2do. round y nuevamente en el tercero

Las cuatro siguientes y últimas peleas de Firpo se efectuaron en Argentina, la primera de ellas fue la segunda contra Spalla en 1926, pero luego se alejó por espacio de 10 años, para regresar en 1936, ganó dos por KO y perdió la última, el 11 de junio, en el Estadio Luna Park de Buenos Aires, contra el chileno Arturo Godoy.  

El boxeador juninense terminó su carrera con registro de 32-6, con 26 victorias por KO. Falleció el 7 de agosto de 1960 debido a un ataque cardiaco. No llegó a ser campeón mundial por esas cosas del boxeo rentado, pero si el reconocimiento dado por la revista “The Ring” del mes de marzo de 2001, la que calificó la pelea de Dempsey vs Firpo como la segunda más emocionante en la historia del boxeo.

Fuentes

Anon. 1923. Firpo solo necesitó 3 minutos 20 segundos para noquear a Herman. Diario de la Marina, p. 14.

Anon. 1923. En lucha fiera donde cualquiera de los dos contendientes podía vencer, salió victorioso Dempsey después de ser duramente castigado. Diario de la Marina, 15 setiembre, p. 13.

Anon. 1924. Las autoridades americanas de inmigración dejan pasar a Firpo. Diario de la Marina, 22 julio, p. 15.

Anon. Luis Angel Firpo. Boxrec.com. https://boxrec.com/en/proboxer/10607

Anon. 2009. Se cumplen 86 años de la pelea entre Luis Firpo y Jack Dempsey. Democracia, 13 setiembre. https://www.diariodemocracia.com/mas-deportivo/16264-deportes/

Anon. 2019. “1973, Les cuento mi verdad de mi pelea con Firpo”. El Gráfico, 22 octubre. https://www.elgrafico.com.ar/articulo/1090/34725/1973-%C2%A8les-cuento-mi-verdad-de-mi-pelea-con-firpo%C2%A8

Romero E. 2016. Un convincente campeón de los pesos pesados, Jack Dempsey. Deportescineyotros.com, 4 mayo. https://deportescineyotros.com/2016/05/04/un-convincente-campeon-de-los-pesos-pesados-jack-dempsey/

Escrito por Esteban Romero, 20 noviembre de 2021

“El Cazador (1978)” y las secuelas de una guerra

La guerra no es más que un asesinato en masa,
y el asesinato no es progreso. “
Alphonse de Lamartine (1790-1869, escritor y político francés)

“El Cazador” (The Deer Hunter, título original) Es un filme bastante viejo, el que no pierde actualidad al reflejar cómo una guerra puede dejar heridas físicas y psíquicas, cómo una guerra daña la estabilidad familiar, la estabilidad de las futuras generaciones, pero aún es cuando esa guerra es injusta e innecesaria.

El director Michel Cimino, con trama de él mismo conjuntamente con los guionistas Deric Washbun y Louis Garfinkle, relata una historia de un grupo de amigos, todos trabajadores en el sector metalúrgico de un poblado de Pensilvania, todos descendientes de familias rusas, los que compartían labor y distracción juntos, entre ella la caza de venados los fines de semana. Esa estabilidad se rompió en el momento que casi todos ellos fueron reclutados por el servicio militar de los EE. UU. para combatir en Vietnam.

El cineasta Cimino muestra una cara de la guerra diferente a la que nos mostró Oliver Stone en “Pelotón (1986)”. A entender del que suscribe, está mal orientada e infundada. Cimino no estuvo en Vietnam, Stone sí lo estuvo. Es controversial poner a los combatientes del VietCong jugando a la ruleta rusa con unos revólveres para ganar dinero. Eso parece una invención, el que haya visitado el sur de Vietnam verá en qué condiciones vivían los guerrilleros, todos bajo tierra y nadie a flote de una ciénaga como ahí se pinta. El dinero no era un objetivo, de nada les servía, así que esa escena es de ponerla en duda largamente. Lo de la tortura no se discute, todos las practican con el objetivo de obtener información del movimiento de las tropas enemigas. En una guerra no hay santos, pero sucede que se presenta la tortura como una diversión de los VietCongs, algo difícil de entender.

Cimino ilustra el ambiente corrupto en extremo de Saigón, una ciudad campeona en prostitución en su época, pero no toca nada de esa inmundicia al nivel de las tropas locales del Vietnam del Sur.

Bien dejando atrás esas escenas muy típicas de un Oeste, nada que ver con los de la guerra entre una nación súper-poderosa contra otra sub-desarrollada. Una luchando por mantener un equilibrio a nivel universal entre Occidente y Oriente en el marco de la guerra fría, la otra luchando por su independencia y reunificación, hay que ver cómo los seres humanos tratan de adaptarse y sobrellevar la nueva vida que la pos guerra les impone. Matrimonios interrumpidos, maridos minusválidos, infidelidad por creencia de fallecimiento de su marido, afectaciones psíquicas producto de los cruentos combates y las torturas.

El gran acierto de la película fue el reparto que, participó en el mismo, encabezado por Robert DeNiro, como el hombre fuerte y de carácter; Meryl Streep, la hija despreciada por su padre, que busca cobija en casa ajena y pone sus ojos en dos hombres, ambos amigos. Un insuficiente y malogrado personaje interpretado por John Cazale, actor que durante el rodaje ya sufría de problemas de cáncer y que muriera antes de que el filme fuera estrenado; el entonces joven Christopher Walken, amigo y casi hermano de De Niro en la película; John Savage, el hombre enamorado de su esposa, a la que no quiere hacer sufrir después de su infortunio en la guerra; George Dzundza, dueño del bar-cafetería, al que la pandilla asistía en sus momentos de relax. En fin, todos pusieron su granito de arena y lograron llevar a esta película a una buena crítica de la audiencia, la que es algo superior a la dada por el que suscribe.

A pesar de los errores vistos- lo dice una persona que pudo conocer de cerca Vietnam años después de la guerra y con una economía de mercado a todo tren- la película lleva ese mensaje de que las guerras deben evitarse por el bien de todos los pueblos, por el bien de las familias y por el bien de la estabilidad de la sociedad.

Escrito por Esteban Hernández, con información consultada en IMDB.com, el 16 noviembre de 2021

No hay que ser de izquierda para combatir a una dictadura

Me parece que la política, por años o por demasiado
tiempo, se ha preocupado por la derecha o la izquierda
en lugar de por lo correcto o lo incorrecto.”
Richard Willard Armour (1906-1989, escritor y poeta de EE. UU.)

Uno aprende todos los días, no sabía que para derrocar a una dictadura hacía falta ser de izquierda. Vaya, vaya, eso es claramente ideas de asarampionados, que no ven más allá de su pobre ideología divisionista y hasta estalinista, que ya es mucho decir. Lenin no era un contrarrevolucionario de acuerdo a las ideas de la ultraizquierda, y él se daba cuenta de que existía gente joven e incluso de más edad que pecaba de lo que él llamó enfermedad infantil del izquierdismo y a tales efectos escribió un folleto, el que probablemente le vendría bien leer a esos pacientes de dicha enfermedad. Mi receta es bálsamo de Lenin, aunque no esté de acuerdo con sus postulados de dictadura de proletariado, no pluripartidismo, represión a las libertades ya mencionadas, etc. etc. etc.  El folleto fue publicado en 1920 y seguro fue como preámbulo a la resistencia a establecer la llamada Nueva Política Económica (NEP) en 1921, la que buscaba establecer una especie de capitalismo de Estado, donde coexistieran los sectores privados y público, reintegrar una buena parte de la propiedad agrícola a manos privadas para que gestionaran su producción a cambio de la entrega de solo un 10% de los productos cosechados. De este modo, los agricultores se veían incentivados para producir dado que obtenían los rendimientos de la restante cosecha vendida. Así de sencillo, pero el camarada Koba, luego conocido como Stalin- el hombre honrado, como osó un comunista improvisado en llamarle- esperó a que Lenin muriera y así comenzar la criminal colectivización agrícola de la URSS, la que costó más de 10 millones de vidas. Le llamaron Holodomor, pronunciado en ruso sería Golodomor, de la palabra Golod (hambre), sinónimo de matar el hambre. Al final se mataron muchas vidas de campesinos que se resistieron al ukaz estalinista.

Lo que hicieron Hitler y Mussolini fue detestable en extremo, pero Stalin no se quedaba atrás con sus gulags y demás medidas represivas. Los llamados socialdemócratas se distanciaron de las posiciones estalinistas, aunque en ocasiones prefieren no hablar del tema por conveniencia.

A eso de izquierda y derecha ya se ha hablado en este blog, algo que surgió el 11 de setiembre de 1789, en sesión de la Asamblea nacional constituyente de Francia, donde se discutía la propuesta de veto absoluto del rey a las leyes aprobadas por la futura Asamblea legislativa. Los diputados a favor de esta propuesta se situaron a la derecha del presidente de la Asamblea, mientras que los contrarios lo hicieron a la izquierda. Así que los de derecha se oponían al cambio y no así la izquierda. Al final, los jacobinos en el poder, los de izquierda, terminaron compitiendo con otras monarquías crueles en atrocidades.

Si uno va a los países nórdicos nadie se pone a hablar de izquierda o derecha. Es cierto que existen partidos de un bando y otro, pero el razonamiento es bienestar, el que puede estar un poquito para allá y otro para acá. Bienestar significa poseer empleo, seguridad social, servicios sanitarios y educativos eficientes, y algo muy importante, libertad para expresarte, para leer lo que más te convenga o te agrade. A fin de cuentas, eso es lo que la población quiere.

Para liberar a un país de una dictadura, los que se lo propongan hacerlo deben tener claro que todo lo que se realice debe ser en pro de la unión del pueblo, evitar las divisiones existentes y procurar el bienestar, donde cada cual puede tener su propuesta, pues todos no pensamos igual, pero se pueden llegar a acuerdos razonables. Esas personas pueden tener distintas opiniones y formas de ver su universo, y no necesariamente tienen que ser de izquierda.

Lo que es un verdadero bochorno es que exista izquierda incapaz de condenar a todo régimen que oprima a su pueblo, que limite sus derechos en general. Como dijera un parlamentario italiano, es muy fácil ser comunista en un país libre, gozar de todos los derechos constitucionales, y difícil de ser libre en los llamados regímenes comunistas.  

El sistema predominante en la URSS y sus satélites hace tres décadas desapareció del mapa, mientras que las pocas naciones que se dicen socialistas, sobre todo en Asia, casi todos adoptan política de mercado libre. La economía centralizada en manos de una cúpula gobernante es la peor forma de hacer prosperar y desarrollar una sociedad, todo un disparate improductivo económico. Al margen de eso, las libertades deben ser garantizadas, el ser humano no es un robot.

El otro tema que no se debe dejar pasar es sobre cuando una persona escapa de ese régimen, no hay porque criticarlo, parece que la historia se trata de ignorar, pues bien, le hago un recordatorio a los que critican a los entes cubanos que escapan. Durante y terminada la guerra civil, casi 4300 españoles llegaron a la Unión Soviética, entre ellos 2895 niños, 130 maestros, 156 marinos, 200 pilotos y casi 900 miembros del PCE y del PSUC (Partido Socialista Unificado de Cataluña). A su vez medio millón de españoles escaparon a Francia, muchos de ellos posteriormente detenidos en campos de reclusión.  

El instinto de conservación de cualquier persona debe respetarse, sobre todo si esa persona no ha instigado a una guerra armada o algo parecido. Pedir a la gente protestar pacíficamente no es un acto bélico, considerarlo así sería como decir que Mahatma Gandhi no era un hombre paz. Así que cuando vayan a hablar, midan sus palabras, lean un poco más y déjense de tanto sarampión, el que no le da vida a nadie.

Los movimientos de liberación de las dictaduras tienen que ser de carácter transversal y no ser obtusamente divisorios. Ni la propia revolución cubana habría llegado al poder en 1959 de no haber sido por el apoyo de una clase media y hasta de entes ricos, los que bastante fondos y medios aportaron a la causa para derribar la dictadura batistiana.

La redacción, 27 noviembre de 2021

Curiosidades beisboleras: hechos del béisbol cubano en el pasado

El talento gana partidos, pero el trabajo en equipo
y la inteligencia ganan campeonatos.”
Michael Jordan

Conde Pozos Dulces

El primer campeonato cubano de béisbol se efectuó en 1878 gracias a la acción y empeño de Emilio Sabourin, propietario de los terrenos del club Habana. El alcalde de la ciudad en aquella época era Don Leandro Álvarez Torrijos, Marqués de Bellavista, quien negó el permiso de efectuar ese juego por ser dudoso y desconocido. Esta decisión cambió por la influencia del Conde de Pozos Dulces, Francisco de Frías y Jacott, poco antes de su fallecimiento, y otras personalidades. Ese primer juego, como ya se sabe, se efectuó el 29 de diciembre de 1878 con la presencia de 3000 espectadores.

Los primeros peloteros españoles en Cuba en el siglo XIX fueron el inicialista Leonardo Ovies y el receptor Antonio Arzola. Ambos jugaban en un placer que está donde mismo radica ahora el hospital de maternidad de Línea en el Vedado. La mayoría de los que iban a practicar el béisbol eran vizcaínos. Entre ellos estaban Ovies y Arzola, los que lograron integrar el equipo del Almendares.

El torpedero “Quilla” Valdés estuvo suspendido junto a Juan Ealo debido a que ellos no podían jugar en otras ligas. La liga Amateur se consideraba la meca del amauterismo en béisbol en Cuba, lo cual no era cierto, ya que había otros circuitos también amateurs, donde jugaban verdaderas estrellas. Era necio creerse Dios cuando a los mismos negros se les negaba en la Liga Amateur jugar. La dificultad llegó en 1942 cuando había que conformar el equipo cubano y Quilla era lo mejor que se podía llevar para cubrir el campo corto. Hubo una fuerte presión popular al efecto y finalmente la Federación Internacional medió y dictaminó que, si un hombre era apto como amateur dentro de su territorio, podría serlo también fuera de este y entonces Quilla pudo representar a Cuba en la Serie Mundial de 1943 y en la Serie Inter-antillana de 1944 en Santo Domingo.

El famoso cómico Arquímedes Pous, el intérprete pionero del negrito de la comedia cubana, llegó a lanzar en un juego informal en Mérida, México, en 1919. También participaron los actores Julito Díaz, Rafael Llorens y el director de orquesta Eliseo Grenet, los que se mezclaron con los Cuban Stars de Tinti Molina, que estaban de gira y en partidos contra las Águilas de Veracruz, y con el Havana Reds que pasaba por el lugar. En ese partido participó “Bombín” Pedroso, pero jugando el center field, y Bernardo Baró.

Esta fue la Pre-selección de peloteros de la Liga Amateur al equipo Cuba a los V Juegos Centroamericanos Barranquilla 1946:

Receptores: Ramiro Ramírez (Teléfonos), Rouget Avalos (Deportivo Matanzas) y Luis Estrada (Caribes UH)

Cuadro: Alfredo “Fatty” Domínguez (Caribes UH) 1B, Mario Díaz (Teléfonos) 2B, Gilberto Soto (Aduana) 3B, Willy Miranda (Teléfonos) SS, Arturo Hoyos (Casino Español), Carlos Torres (Deportivo Cárdenas), Alejandro Montesino (Círculo de Artesanos), y “Pancho Villa” de Armas (Teléfonos)

Jardineros: Hiram González (Caribes UH), José Luis “Jorocón” García (Regla), Alberto “Galate” Gómez (Atlético Cuba), Mariano Pimentel (Casino Español), Mario Morera (Círculo de Artesanos), “Curro” Pérez (Deportivo Matanzas)

Lanzadores: René “Tata” Solis (Deportivo Rosario), Ignacio Ferrer (ADC), Ángel “Catayo” González (Deportivo Matanzas), Miguel “Colegial” Montiel (Casino Español), “Navajas” González (Deportivo Rosario), Ramón “Moín” García (Teléfonos)

Los subrayados no hicieron finalmente el equipo, su lugar fue ocupado por el jardinero Mario Pérez, al parecer único negro en esta escuadra; el inicialista Bernardo Cuervo, el infielder Julio Delgado, y los lanzadores Generoso “Curricán” Stable y Mario “Nicaragua Chacón, todos del Violeta-Vertientes. El conjunto fue dirigido por Víctor “Vitico” Muñoz con Fabio de la Torre y Carlos M. Fleites como asistentes. En esta justa Cuba terminó empatada con Colombia en la primera vuelta, ambos con 6-1, mientras Dominicana ocupó el tercer lugar (4-3), pero la decisión final fue entre colombianos y quisqueyanos, ya que Cuba fue vencida en el primer juego por el derecho colombiano Carlos “Petaca” Rodríguez.

En setiembre de 1947 no estaban definidos los árbitros para la Liga cubana profesional de béisbol. Obviamente, la figura central era Amado Maestri, el que oficiaba en la pelota de Maracaibo, Venezuela hasta ese momento. El reglano puso las cosas claras en materia de contrato para esa temporada. En igual situación se hallaba Bernardino Rodríguez, pero ambos solidarizados en una posición firme respecto al dinero que había que pagarles, caso contrario, Venezuela los estaba esperando, incluso con mejores salarios. Le tocó discutir este asunto con Maestri a su coterráneo Miguel Ángel González en funciones por el ejecutivo de la liga. La reunión fue en la Manzana de Gómez en el actual Centro Habana. Maestri muy decidido le dijo a Miguel Ángel: “mi salario debe ser de 1500 pesos mensuales.” Recuerden que un peso en aquella época era equivalente a un dólar. Mike González le respondió que eso era mucho dinero. Maestri le dio a entender que así o se iba para Venezuela, donde tenía una buena oferta, para finalmente añadir: “Soy mayor de edad y no necesito consejos.” El plazo dado era de dos días, de lo contrario Maestri se iría. Emilio de Armas quiso suavizar el asunto, pero Maestri estaba en sus trece y Bernardino lo secundaba. Un día antes de ese lunes, Tomás de la Cruz, el lanzador y presidente de la Asociación de Peloteros, fue a hablar con Maestri a fin de buscar una solución. Maestri siguió con lo suyo y finalmente se aceptó su demanda salarial, la que firmaron Maestri y Bernardino, aunque les quedó por seleccionar un tercer árbitro.

Escrito por Esteban Romero 18 noviembre de 2021