“Una casa en el corazón (2015)”, y el derecho a la vivienda

La falta de hogar es una de las violaciones más graves
del derecho a una vivienda adecuada, ha aumentado
considerablemente en muchos países económicamente adelantados.”
ACNUDH sobre el derecho a la vivienda

El derecho a una vivienda adecuada es parte del derecho a un nivel de vida adecuado consagrado en el artículo 25 de la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948 y en el artículo 11.1 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de 1966. Legislado está este derecho en los países democráticos del mundo, otros muchos con apariencias democráticas y las dictaduras, pero del dicho al hecho van un buen trecho. ¿Cuántos lo cumplen?

Leyendo un poco al respecto, veo que se calcula que más de mil 800 millones de personas viven en asentamientos informales o en bajareques, como le llamamos en Cuba. Supuestas viviendas que carecen de agua potable, higiene y electricidad, y que con un vientecito o aguacero se destruyen. Este problema lejos de resolverse, se agrava cada vez más.

No hay que ir a algún país pobre de África para ver este problema, el que suscribe lo ha visto hasta en Nueva York y en Los Ángeles, los llamados homeless, algunos viviendo en pleno invierno debajo de un puente y tapándose con papel, cartón o paja.

La película de referencia, de producción italiana, nos muestra este problema en la propia capital, en Roma, y como la gente se las arregla para ir resolviendo una situación complicada. La trama gira desde un ángulo de corrupción familiar hasta caer en una de sus consecuencias más grave, el desalojo de hija y madre por falta de pago de hipoteca bancaria.

Inimaginable adonde fueron a parar esas dos criaturas. El río Tevere atraviesa la ciudad de Roma y hasta inicios de la década de los años 60 el agua no estaba contaminada como ahora, incluso muchos romanos se bañaban en el río, algo que ahora nadie se atreve a hacer. El río es parte del paisaje de esa bella y antigua ciudad, la que personalmente adoro, pero si uno echa un ojo al color del agua, la verá turbia en extremo y, si la huele, hasta pestilente en algunos lugares. Así y todo, en ese ambiente no faltan las nutrias, animal que muchos confunden con las ratas.  

Para no decir más, la pareja de hija y madre paró a vivir hasta un lar de este tipo. El municipio en Roma suele dar viviendas a muchos de estos desgraciados, pero no alcanza para todos. No obstante, sí se preocupa por la suerte de los menores de edad, por lo que padres que no puedan garantizar el estándar requerido al niño, la ley se toma el derecho de recoger al menor y llevarlo a un lugar de acogida, algo muy difícil para una madre o padre que realmente amen a su hijo o hija.

Está demás decir que la peli resulta muy interesante, primero por ver lugares de Roma donde se hicieron tomas de escenas, y por otro, poder oír el dialecto romanesco, que resulta familiar y simpático.

El filme es dirigido por Andres Porporati y cuenta con el protagonismo de Cristiana Capotondi, la madre de la familia; Aurora Giovinazzo, la niña; el convincente encargado del hospedaje mal situado, Giorgio Colangeli; y el muy cooperativo Francesco interpretado por Simone Montedoro. La peli está disponible en la plataforma de Netflix y para aquellos que gusten ver Roma, les agradará, aunque les advierto que no una peli color de rosa.

Fuentes consultadas

IMDB.com

ONU. 2024. El derecho humano a una vivienda adecuada. Naciones Unidas, oficinal del Alto Comisionado. https://www.ohchr.org/es/special-procedures/sr-housing/human-right-adequate-housing

Esteban Hernández
5 marzo 2024

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.