“Un campeón es aquel que se levanta aun cuando ya no puede”. Jack Dempsey.
Cuando hablaba de boxeadores de la división de los pesos completos, en particular del destacado Jack Johnson, me equivocaba al decir que pocas esperanzas blancas volverían a ser campeones de esta división. Ciertamente hubo algunos muy renombrados por sus aptitudes pugilísticas. En esta oportunidad hablaré de uno de ellos, Jack Dempsey.
William Harrison «Jack» Dempsey nació el 24 de junio de 1895 en el pueblo de Manassa, Colorado, de ahí que le llamaran luego “El matón de Manassa”. Su crianza tuvo lugar en la granja de su familia, cuyo padre era un emigrante escocés. Allí tuvo que trabajar, algo que lo dotó de un carácter de esfuerzo y empeños en su vida posterior. Igualmente adquirió fuerza y resistencia debido al trabajo agrícola que realizó. Había quien decía que tenía un cuello de toro. Su padre pensaba que continuaría su vida rural y el manejo de su granja, pero no fue así. El joven William admiraba al campeón afroamericano Jack Johnson, el hombre que derrotó sin piedad a Tommy Burns en Australia, así como a Jess Willard, el vaquero gigante, que logró derrotar en pelea arreglada a Jack Johnson en la Habana.

Jack Dempsey
Con 19 años de edad, disputó sus primeros combates, algunos de forma encubierta en los alrededores de su pueblo natal. Desde sus inicios se vio que Dempsey tenía una pegada descomunal sobre todo con su derecha. Muchos aldeanos que le vieron se quedaron asombrados de lo que Dempsey era capaz de hacer con sus puños. Tanta fue la fama que un buen día le llegó una oferta para pelear en Salt Lake City, la ciudad de los mormones, Estado Utah. Dempsey no lo pensó dos veces y se despidió de sus padres.
Salt Lake city tiene fama de ser ciudad de los mormones religiosa, pero allí abundaban entonces vaqueros, marineros, apostadores, buscadores de oro, en fin, de todo un poco. En 1915 existía un gimnasio dirigido por un gigante de nombre Chief Gordon, quien le dio las primeras instrucciones a Dempsey y entabló un primer combate para ver las habilidades del joven recién llegado. Dempsey se esforzó en golpear a Gordon, pero no le resultó fácil, hasta que logró encajarle un golpe en la mandíbula, y felicitado después por este logro.
Gordon se dio cuenta que tenía un boxeador en sus manos, por lo que viajó junto con Dempsey por todo Utah efectuando varios combates, su primera pelea, bajo la tutela de Gordon, terminó en tablas contra Laverne Collier en Pocatello, Idaho, los siguientes dos terminaron por la vía del KO, que le valieron para que lo apodaran como “El ciclón de Salt Lake”. No obstante, su cuarta pelea con Gordon de entrenador fue una derrota a manos de Jack Downey por puntos. Otro rival difícil fue Johnny Sudenberg, con quien entabló en sus dos primeros combates. Con Downey entabló en su siguiente pelea contra este boxeador, pero luego lo logró noquear, igual receta le dio a Sudenberg en su siguiente combate. En lo sucesivo, Dempsey tejió una impresionante cadena de victorias por la vía rápida hasta que chocó con el afroamericano John Lester Johnson en 1916, pelea que entabló y que le valió una crítica severa de la prensa, la que lo catalogó de boxeador incapaz. Como se ve el racismo lleva a emitir criterios errados, este es el caso.
Otro púgil difícil para Dempsey fue Willie Meehan, con quien entabló dos veces y perdió igualmente en dos ocasiones. Dempsey siempre fue superado por Meehan y siempre por decisión.

Dempsey (izq.) y Meehan en combate de setiembre de 1918
El 4 de julio de 1919 Dempsey subió al ring del Bay View Park Arena de Toledo, Ohio, para combatir contra el gigante Jess Willard en discusión por el título de los pesos pesados. En ese lugar se reunieron 19 500 personas para presenciar este combate, que se inició con un inconveniente, la campana no sonaba para dar inicio al primer round, lo que obligó a un árbitro a usar un silbato. Dempsey le dio duro a Willard y lo tiró, el árbitro contó diez y dio a Dempsey ganador. Cuando el hombre de Manassa se estaba vistiendo para retirarse en su camerino, vinieron a informarle que el conteo no había llegado a diez, pues le tocaba el turno a la defectuosa campana. Dempsey volvió al ring y a la carga, Willard soportó parado en los rounds 2 y 3, pero terminado el tercer episodio, la esquina de Willard paró el combate, quien sólo decía que tenía cien mil dólares y una granja, como diciendo de que no valía la pena seguir combatiendo. Se ha especulado que Dempsey había rellenado sus guantes con cemento para este pleito, uno de los acusadores era el ex- famoso vaquero y justiciero, Bat Masterson, quien se dedicaba al final de su vida a escribir para The Morning Telegraph. La acusación de Masterson nunca pudo ser probada, la realidad es que Willard salió masacrado de este pleito. No obstante, existe otro testimonio que dice que el vendaje de Dempsey, sin que el boxeador lo supiera, había sido humedecido con el llamado Yeso de París, afirmación dada por Jack «Doc» Kearns, persona muy metida en el mundo del pugilismo de aquel entonces. Kearns afirmó que todo el mundo sabía que Dempsey derrotaría a Willard por su superioridad boxística, pero las apuestas fueron de 10-1 a que Dempsey lo tumbaría definitvamente en el mismo primer asalto, lo cual no ocurrió.

Dempsey (der.) golpea al gigante Willard
Las siguientes dos peleas de Dempsey terminaron por la vía rápida. Expuso su título frente al francés Georges Carpentier el 2 de junio de 1921 en Jersey City, pelea que terminó con KO en el cuarto episodio. Igual suerte corrió el argentino Luis Ángel Firpo, el que sucumbió en el segundo round ante los puños de Dempsey. Esta pelea tuvo lugar el 14 de setiembre de 1921 en el Polo Grounds de Nueva York.

Dempsey noquea a Carpentier
Pasó buen tiempo para que Dempsey volviera al ring, pero esta vez tenía otro púgil avezado, de nombre Gene Tunney, oriundo de Greenwich, Connecticut, y conocido como El Marino Luchador. En esta pelea Tunney fue dueño y señor del ring, para vencer por decisión a Dempsey en 10 episodios.
Diez meses después Dempsey vencía por KO a Jack Sharkey en el séptimo round. Por eso puede ser que Dempsey haya pensado en la posibilidad de vencer e Tunney en pelea de revancha, la cual se organizó para el 22 de setiembre de 1927 en el Soldier Fields de Chicago. Durante este combate, apodado como el de la cuenta larga, Dempsey noqueó a Tunney en el séptimo round pero según la regla, debió ir a una esquina neutral durante el conteo. El árbitro lejos de ordenar a Dempsey ir a la esquina, esperó a que El Matón de Manassa se retirara, fue entonces que comenzó la cuenta, lo que dio tiempo a que Tunney se recuperara. Realmente Tunney fue noqueado y luego favorecido por el árbitro Dave Barry. Lo interesante de todo esto es que el árbitro debió ser Davy Miller, quien fue reemplazado de esa función por Barry, por orden nada más y nada menos que de Al Capone. El mafioso quería que Tunney ganara, pero luego había apostado a favor de Dempsey. A Tunney le habían ofrecido un millón de dólares por perder en esta pelea, lo cual el púgil no aceptó. En el octavo round Tunney logró noquear a Dempsey, la pelea continuó con superioridad de parte de Tunney, al que se le adjudicó la victoria por decisión. Dempsey y sus apoderados protestaron este veredicto, Tunney había permanecido 14 segundos sobre la lona y el árbitro Barry cambió todo el resultado de este combate con su mala decisión.

Tunney noqueado en el 7mo round frente a Dempsey
Después de esa pelea, Dempsey estuvo 4 años sin subir al cuadrilátero, por fin lo hizo en Reno en 1931. Se trataba de peleas cortas, de cuatro episodios. En 1940, efectuó su última pelea a dos rounds contra Ellis Bashara en Charlotte. Muchas de estas peleas no están registradas oficialmente. Igualmente se asoció con Tex Richard y organizó el combate de Max Baer contra el español Paulino Uzcundum, la que fue victoria del alemán en 20 asaltos.
En 1942 fue reclutado por el ejército de su país y participó en la Segunda Guerra Mundial como oficial de Guardacosta y como entrenador de miles de soldados. Después participó en el desembarco de Tarawa en la guerra contra Japón. Alguna que otra vez sirvió de árbitro, juez y analista de boxeo.
Dempsey abrió un lujoso restaurante en Broadway, Nueva York y pasó el resto de sus días en la Gran Manzana y alejado del mundo del boxeo. A este gran boxeador se le recuerda con admiración como boxeador, aparte que nunca se opuso a enfrentarse a boxeadores afroamericanos, a los que respetaba como a los blancos. No en balde Mike Tyson imitaba a este boxeador, no usaba calcetines y se presentaba con las sienes afeitadas.
De por vida Dempsey ganó 66 peleas, 51 de ellas por la vía rápida, perdió 6 y empató en 11 combates. Este púgil tiene el récord de más victorias por KO en el primer asalto, 26 en total. La International Boxing Research Organization (IBRO) lo clasificó entre los diez mejores pesos pesados de la historia. Falleció el 31 de mayo de 1983, a los 88 años de edad.
Bibliografía consultada
Anon. Jack Dempsey. Biografías. http://www.historiadelboxeo.com/biografias/jdempsey.htm
Anon. Jack Dempsey. Boxrec.com. http//boxrece.com/boxer/9009
Anon. Jack Dempsey. Biografíasyvida.com. http://www.biografíasyvidas.com/biografia/d/dempsey.htm
Anon. 2016. Jack Dempsey biography. Biography.com Editors. http://www.biography,com/people/jack-dempsey-9271466#personal-life-and-legacy
Anon. 2013. The Saga of Jack Dempsey’s «loaded» gloves: part I. The Sweet Science. http://www.thesweetscience.com/news/articles/17690-the-saga-of-jack-dempseys-loaded-gloves-part-1
Anon. 2013. The Saga of Jack Dempsey’s «loaded» gloves: part I. The Sweet Science. http://www.thesweetscience.com/news/articles/17690-the-saga-of-jack-dempseys-loaded-gloves-part-2
Escrito por Esteban Romero (30 abril de 2016)
Dempsey fue famoso en su época, todo un ídolo en Norteamérica.
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DEMPSEY NUNCA «ESTUVO NOQUEADO», DEBE CORREGIR ESE PIE DE FOTOGRAFÍA, SOLO RECIBIÓ UN KNOCKDOWN
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Ahora veo escrito «tumbado», lo cual no es noqueado. He leído lo suficiente sobre Dempsey, y sé que en ambas peleas contra Tunney no fue noqueado, además cuando hablo de la revancha, señalé que Dempsey debió haber ganado ese combate, ya que hubo error del árbitro en el conteo cuando Tunney cayó en el séptimo noqueado realmente.
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