“¡Mi único deseo es conocer el mundo y
las comedias que en él se representan!”
René Descartes (1596-1650)
filósofo, matemático y científico francés
Si de algo pueden con razón alardear los cubanos es que se ríen de todo, hasta de sus propias desgracias. En ese contexto, históricamente Cuba ha tenido muy buenos comediantes. De hecho existía un activo teatro vernáculo hasta 1960 y muchos de los comediantes cubanos que emigraron se instalaron con éxito en el extranjero y continuaron con sus chistes y programas. Un ejemplo vivo de eso era el dúo integrado por Leopoldo Fernández y Aníbal de Mar con su famosa Tremenda Corte, programa que se escuchaba radialmente y se veía también por la TV en muchos países de América. Recuerdo que hace unos años, estando en Ciudad Panamá, a las 6 a.m. un canal televisivo ponía la Tremenda Corte.
Les puedo asegurar que una cosa es por la TV y otra en presentaciones privadas o en fiestas de centros de trabajo, donde al no haber censura la broma alcanza sus más altos niveles.
Quiero hablar de mis recuerdos de esos comediantes y para empezar he escogido a uno que me quedaba cerca. Durante un tiempo el famoso Enrique Arredondo fue casi vecino nuestro, y alguna que otra vez le podíamos oír hablar de la historia de los grandes cómicos cubanos, los que empezaron a escasear en Cuba ya en la década de los 80. Todo eso tiene su razón, si el cómico no puede burlarse de casi nada, le resulta difícil entonces “inventar”. Tiene que tener mucho genio y a Arredondo, por suerte, le sobraba. Ese actor, nacido en 1906, interpretó el papel del negrito como otros tantos cómicos cubanos en el Teatro vernáculo, lo hizo primero en el teatro Alhambra, sustituyendo a Sergio Acebal, a quien personalmente nunca vi actuar.

Enrique Arredondo, a la izq. arriba como Bernabé, a la der. como Cheo Malanga, abajo como el negrito
Otro vecino y amigo en mi barrio me aseguró que Arredondo había también actuado en el Teatro Shanghai, el cual fuera cerrado en 1959 definitivamente. Ese teatro estaba ubicado en el barrio chino de la Habana y los shows del mismo se mostraban a altas horas de la noche. Era algo así como un teatro con presentaciones de relajo, de doble sentido, muy llenas de picardía, donde Arredondo hacía de las suyas.
En los años 60 hasta los 80, Arredondo estuvo interpretando el papel de Bernabé en el programa “Detrás de la Fachada”, el cual era animado por Consuelito Vidal y Cepero Brito, así como en “San Nicolás del Peladero”, interpretando dos papeles, el guapo Cheo Malanga, muy corajudo con los débiles pero no así con su propia mujer, la Mamá Chula interpretada por Natalia Herrera, y el del Dr. Chapotín, papel que ya había hecho a finales de los 40 para la radio de CMQ.

Natalia Herrera, la Mamá Chula de «San Nicolás del Peladero»
Arredondo dejó muchos dichos que son muy recordados, uno de ellos era “Mentira tú me estás engañando” o “No me digas”. Improvisaba como el mejor, muchos actores que trabajaban con él, debido a esas improvisaciones, se veían obligados a esconder su risa en medio de las escenas en la TV. Según él me contó, un día le habían invitado a dar un show para los trabajadores que cortaban caña en un central habanero. Él aceptó pero pidió a tiempo el guión de lo que allí harían. Para su asombro me dijo que todo el programa giraba alrededor de la caña, por lo que acto seguido dijo que él iba si le dejaban hacer lo que él quería. Sin mucho pensarlo y a sabiendas que Arredondo era el verdadero gancho del programa previsto, le dijeron al comediante que aceptaban su propuesta pero que debía decir más o menos el contenido de su presentación. Arredondo respondió que confiaran en él, que el éxito estaba garantizado. Y así fue, sonó múltiples chistes de doble sentido, les habló de muchísimas cosas menos de la caña, pues caña era lo que veían a diario y eso no era para hacer reír a nadie allí. La gente allí, me aseguró, terminó arrastrada de la risa.
Otro día mi difunta abuela le habló del comediante Arquímedes Pous, y Arredondo sin pensarlo mucho, le dijo a mi abuela, “Sra., Ud. si es vieja de verdad”. Mi abuela era oriunda de Cienfuegos, y Pous fue uno de los primeros negritos de la comedia cubana también. Ya hablando más en serio el gran Bernabé le aseguró a mi segunda madre que Pous era un referente de la comedia cubana de todos los tiempos y que tanto él como otros comediantes aprendieron mucho de Pous.
Cuando Arredondo llegaba a la carnicería el día que llegaba la carne racionada, él sin más ni más le decía al carnicero: “Chico, ¿tienes idea que edad tenía la vaca o el buey de la última entrega? Me imagino que tendría algo cercano a los 100 años ¿No crees?, estaba esa carne dura como un palo”. El carnicero reía y le respondía que él daba lo que le entregaban. El comediante en otra ocasión viajaba en su Lada por la avenida 10 de Octubre cuando ocurrió un accidente que obligó a parar el tráfico, no muy lejos de él iba un jeep de mi centro de trabajo, en él un compañero ya fallecido de nombre Cecilio, quien igualmente se bajó del jeep para ver lo sucedido. Cuando Arredondo lo vio, no perdió tiempo en exclamar “Negro, tú si estás grande”. Efectivamente, Cecilio era un hombre de 6 pies y más de estatura, y Arredondo en varias oportunidades cuando se tropezó con él en aquel lugar, solo decía, “coño, chico, este tipo es una vara de tumbar frutas”. Precisamente en “Detrás de la fachada” él hacía escenas junto a otro afrocubano, el cual era llamado Bolondrón, interpretado por Pedro Bascot, quien no era más que un simple cartero y vivía enamoradísimo de la muy coquetona Sarita Reyes, la cual tampoco escapaba de los ojos de Bernabé (Arredondo).

Sarita Reyes aparece detrás de María de los Ángeles Santana en una escena de «San Nicolás del Peladero»
En “San Nicolás del Peladero” actuaba Carlos Moctezuma interpretando el papel de Ñico Rutina. Sucede que en una época Moctezuma interpretaba a la vez un papel de gitano español en un serial de aventuras en la TV. No recuerdo como lo llamaban, lo cierto es que él solía preguntar en esas aventuras: “¿Y se pué sabé…..?”. No se esperaba Moctezuma que Cheo Malanga (Arredondo) en San Nicolás sin pensarlo mucho le soltara la misma pregunta. Moctezuma no pudo aguantar la risa y perdió hasta el hilo de la actuación, escondió su rostro con una tos ficticia, hasta que pudo volver a continuar el guión y la escena.

Carlos Moctezuma (Ñico Rutina) con Aurora Basnuevo (Chisquitica Rubalcaba) en «San Nicolás del Peladero»
Un disco LP de vinil con chistes de Arredondo fue producido y les puedo asegurar que los mismos, todos muy picantes y llenos de humorismo, son un deleite para cualquiera que lo oiga. Muchos, como me sucede a mí, lo hemos oído muchas veces y no una. También dejó un libro autobiográfico, publicado en la Habana en 1981 y titulado “La vida de un comediante”, el cual lamentablemente no he leído y de haber caído en mis manos habría devorado en horas.
El otro, a quien no conocí, pero ya mencioné, era uno de los pioneros de la comedia cubana, Arquimedes Pous, nacido en 1891 en Cienfuegos y que terminó convirtiéndose en uno de los primeros negritos de la comedia. Fue un hombre que desde pequeño gustaba de actuar, lo hacía en obras infantiles. Su debut en teatro fue en el Actualidades de la Perla del Sur cuando tenía apenas 15 años y apareció por primera vez como negrito en la obra llamada Chelitoterapia. Su éxito fue tal que poco tiempo después fue contratado por el teatro Martí en la Habana, aunque previamente ya había recorrido buena parte de Cuba actuando en varios lugares. Pous logró un éxito casi inmediato y con su experiencia acumulada se fue haciendo director y coreógrafo teatral a la vez. Viajó a varios países de América Latina y de Norte América.

Arquímedes Pous como era personalmente y en varias fotos como el negrito de la comedia
Entre sus obras aparecen “Papá Montero”, “Los funerales de papá Montero”, “Las Mulatas de Bam-bay”, “La Clave de Oro”, “Mérida Carnaval”, “Yucatán Souvenir”, y “De México vengo” entre otras.
Pous no escatimaba recursos para hacer de la comedia un espectáculo único. Muchas de sus obras fueron llevadas al teatro como opereta.
Lamentablemente su vida fue corta realmente, pues en un viaje a Puerto Rico, enfermó y murió a la edad de 34 años.
En próximas entregas hablaremos más sobre los grandes de la comedia cubana, sobre todo lo que este autor logró ver en el pasado.
Fuentes
Anon. Arquímedes Pous, el mejor negrito cubano. Estrella de Jagua. https://estrelladejagua.wordpress.com/2016/05/18/arquimedes-pous-el-mejor-negrito-cubano/
Navarro F.G. Legado de teatrista cubano Arquímides Pous permanece vivo. Cienfuegos la perla del sur. http://cienfuegoscuba.galeon.com/legadoteatrista.htm
Vizcaino María Argelia. Humorismo cubano. http://www.mariaargeliavizcaino.com/m-Humoristas-Cubanos.html
Escrito por Ricardo Labrada, 21 enero de 2017